Suena el Lux aeterna del Requiem de Mozart mientras unos actores se mueven por escena. No entiendes bien lo que ocurre hasta que, de repente, la acción se congela y te encuentras ante el Descendimiento de Caravaggio. Entonces comprendes que ¡has asistido a la ‘precuela’ de un cuadro! No da tiempo a sobreponerse, porque a continuación llega la Magdalena en éxtasis, y luego la Crucifixión de san Pedro, la Decapitación de san Juan Bautista, Judith y Holofernes, la Flagelación, el Martirio de san Mateo… Esto son Tableaux Vivants
Qué increíble manera de contemplar las escenas bíblicas a través del talento de Caravaggio han encontrado estos actores. Siéntense y disfruten.