- Porque está basado en la exitosa novela de Fernando Aramburu que lleva su mismo nombre. Una obra imprescindible que se aproxima con veracidad, emoción y realismo a lo que se vivió en la sociedad vasca durante muchas décadas.
- Porque tiene una clara pretensión de reconciliar por medio de la verdad. Consigue demostrar cómo el terrorismo es capaz de penetrar en los afectos de las personas y destrozar la vida de todos los implicados, sacando así lo peor en muchos de los casos.
- Porque la ambientación, los diálogos y los escenarios trasladan a la perfección al contexto de la época. A pesar de no ser personajes históricos, describe con precisión cómo podrían ser los escenarios donde discurre esta terrible pesadilla.
- Por la interpretación de todos los actores, especialmente de los personajes de Miren y Bittori, que saben con genialidad transmitir el dolor generado por esta situación.
- Porque es entretenida y capaz de mantener la tensión en el espectador, pese a que la historia es ya bastante conocida para la mayoría.
- Porque en un mundo cada vez más violento y alejado de la verdad, conviene recordarnos qué ocurre cuando convertimos a las ideas en absolutos y a los vecinos en enemigos.
