Este libro recoge fundamentalmente los artículos breves que ha ido publicando la autora a lo largo de los últimos años en revistas como Alandar y El Ciervo, aunque al final se incluyen algunos artículos más extensos publicados en otras revistas. Con su delicadeza, finura, inteligencia y humor habituales, Dolores Aleixandre nos ayuda a escuchar y comprender mejor la Palabra de Dios, a acogerla dentro de nosotros, para que esa Palabra vaya configurando y modelando nuestra vida. Un libro ameno y práctico, pues cada artículo ayuda a reflexionar sobre ciertos aspectos de la vida propia e incluso puede invitar a ponerse a orar.
“No podéis dedicaros a servir a Doña Apariencia”, parece recomendarnos el Evangelio, “porque no os quedará tiempo para lo que de verdad importa. Centraos allí donde está lo mejor de vosotros mismos, allí donde se esconde vuestra verdadera belleza”. Porque además hay demasiada gente “sin figura ni belleza” y es precisamente hacia ellos donde hay que dirigir la mirada. Aunque quede menos tiempo para el espejo…” (pág. 116).