Creer en la resurrección es parte central de nuestra fe, pero no siempre encontramos buenos catequistas o libros que lo expliquen de un modo que realmente nos llegue al corazón y nos haga entender por qué es tan grande esta verdad. En este libro, Alexander Schmemann, sacerdote y profesor ortodoxo, reúne charlas y escritos breves que nos ayudan a descubrir qué significa de verdad este dogma.
La resurrección de Jesús y lo que proclamamos en el Credo no es solo una fórmula repetida: es un reto personal y pastoral. ¿De verdad el cuerpo es malo y solo el espíritu resucita? ¿Jesús hablaba tanto de la vida eterna porque despreciaba esta vida? Nada de eso. Nuestro cuerpo es regalo de Dios y es el medio por el cual podemos relacionarnos con el mundo, que también ha sido creado por Él.
Lo bonito del mensaje cristiano no es “aguantar hasta que nos llegue la muerte”, sino algo mucho más radical: con la resurrección de Cristo, la aspiración es vencer la muerte. La lectura ágil de este libro te permite entrar poco a poco en este misterio. No da respuestas cerradas, pero sí te ofrece un andamio sólido para sostener la esperanza de la fe.
“¿Hay que aceptar la muerte? Cristo lloró ante la tumba de su amigo. No podemos entenderla como la liberación de este mundo cambiante y malo. Dios no ha hecho la muerte ni se complace en el exterminio de los vivos. Dios creó la vida, y se deleita con su mundo, con la alegría de la vida. ¿Cómo entró entonces la muerte? Por el pecado, contra el cual luchamos cada día”.

