Hace unos meses me metí algo despistada en una sala de cine pensando en ver una peli recomendada por un amigo, Searching for Sugar Man. Resultó ser un documental bien interesante. Cómo alguien que componía canciones, grabó discos, desapareció mientras a miles de kilómetros su música fue símbolo de la lucha contra el apartheid. Memoria perdida si Stephen Segerman y Craig Strydom nunca hubieran tirado del hilo en busca de aquel hombre desconocido. En ese país donde Cold Fact, que así se llama el disco, fue éxito, Sudáfrica, se encuentra hospitalizado en estado grave Nelson Mandela, sobra decir sobre él y lo que ha supuesto su lucha y su vida. Cuando él se vaya, su memoria, sus recuerdos, pensamientos, aprendizajes, errores, época, país en el que vivió y luchó será recordado por todos y todas, escrito, grabado, etc…para que ojalá no olvidemos…
El pasado fin de semana hice algo no muy habitual, sentarme con mi padre de 88 años a preguntarle por sus recuerdos de infancia, por la Huelva y la España en la que nació y creció, por ese tiempo en el que casi nada era sólido…. Un tiempo donde la vida dependía del médico del pueblo y de estar en el bando correcto en el momento oportuno. Hay una España, no tan lejana, llena de sonidos, batallas, carencias, naturaleza en estado puro, travesuras, mestizajes, profesiones sin títulos, libertades y cárceles, héroes anónimos de la que podríamos aprender mucho, sabiduría a la vuelta de la esquina. Quizá vendría bien un Searching for… casero y cercano, con el rostro de nuestras abuelas, abuelos, madres, padres, vecinos, vecinas… y así rescatarlos del pronto olvido.