Para pensar
1. En buena medida tenemos una historia de conversión. La de John. ¿Qué te parece el recorrido que hace durante la película? ¿Qué le lleva a cambiar? ¿Te parece creíble esa trayectoria
2. La película ofrece una reflexión sobre el mal, personificado en los soldados japoneses. La violencia que recorre toda la película es un triste eco de otras formas de violencia actual. En concreto, la violación como estrategia ofensiva nos recuerda episodios de triste actualidad (como la sistematica violencia de Boko Haram). ¿Qué se puede decir ante algo así?
3. La película es maniquea. Maniqueísmo es describir un mundo de héroes y villanos, santos y demonios, personajes puros y otros malévolos. En este caso, los verdugos son los japoneses, mientras entre los chinos encontramos todas las virtudes. ¿Cabe una lectura no maniquea de la realidad?
4. La idea del sacrificio. De dar la vida. Es poderosa. ¿Se te ocurre algún ejemplo concreto de personas que se sacrifican por otras, muriendo por ellas o viviendo de una manera determinada?
5. El progresivo acercamiento entre las estudiantes y las prostitutas pasa del desprecio (basado en el prejuicio) a una mezcla de comprensión y respeto que surgen al empezar a comprender de otra manera a las personas. Es interesante esa evolución. Trata de detectar espacios de nuestro mundo donde los prejuicios se convierten en barrera que impide la comunicación y el encuentro.
6. Las mayores víctimas de las guerras son muchas veces las mujeres y los niños. Es algo que no conviene olvidar.