Hace unos días fui a Madrid a visitar a la familia y aprovechar para visitar la ciudad. Camino de Madrid, por la autovía, me encontré varias veces el cartel luminoso con un mensaje: «Mantenga la distancia de seguridad»… y pensé que es una frase que se puede aplicar a muchas de nuestras realidades y situaciones diarias, porque de no mantener la distancia podemos tener problemas de ‘seguridad’.
Es necesario a veces, en este viaje que llamamos vida, mantener la distancia de seguridad con esas personas o situaciones que nos restan, que nos hacen dependientes, que van achicando nuestra originalidad, nuestra personalidad… así que pensé que igual este cartel es una ‘señal’ para retomar eso que se propone en los ejercicios espirituales, de analizar si las ‘cosas’ (entendiendo por cosas también personas, situaciones…) me hacen bien por ser sanas, por ayudarme a crecer y entonces tengo que seguir entrelazándolas a mi vida; o si por el contrario hay personas y situaciones que no hacen bien y ante las cuales tengo que mantener la distancia de seguridad.
Pues que tengáis buen viaje por esta vida nuestra, y atentos a las señales.