Andrew Dufresne es condenado falsamente por el asesinato de su mujer a cadena perpetua. En la cárcel conocerá a Red, otro recluso, con quien entablará una relación de amistad. Y esta conversación forma parte de esa amistad. Hablan de sueños, de proyectos, pero también de frustración y decepción. ¿Qué lógica podrá más? ¿La de quien se resigna a un «esto es lo que hay» o la de quien se niega a dejar de esperar?
Ante las dificultades de la vida podemos hundirnos, desesperar y zozobrar. O podemos afrontarlas con esperanza, pensando que siempre hay motivos para empeñarnos en vivir. Siempre hay motivos para que la esperanza venza a la desesperanza. ¿Vivimos desde esta dinámica la vida? ¿esperanzados por disfrutar de cada día como una nueva posibilidad?
Cadena Perpetua (Frank Darabont, 1994)