En una carta escrita a Juan de Verdolay, san Ignacio se refiere al grupo de los primeros compañeros con estas palabras: «De París llegaron aquí, mediado enero, nueve amigos míos en el Señor, todos maestros en artes y asaz versados en teología, los cuatro de ellos españoles, dos franceses, dos de Saboya y uno de Portugal». La amistad ha sido desde el principio una nota constitutiva de la Compañía de Jesús. Pero no se trata de una amistad cualquiera, si no una amistad en el Señor, como se explica en este vídeo.