Probablemente te hayas asustado. Y con razón. No hay peor cosa cuando estás de exámenes que pensar que todo el esfuerzo, las horas de estudio, los cansancios… no tendrán ningún reconocimiento oficial. Has escuchado mucho eso de que estudias para aprender, para labrarte un futuro, para ampliar tus horizontes… pero al mismo tiempo sabes que todo está pensado para que tú vayas sacando títulos que te sirvan como llaves para abrir la siguiente etapa. Lo importante de 2º de bachillerato es aprobar la selectividad ¿por qué? Porque así puedes ir a la universidad. ¿Y para qué ir a la universidad? Para sacarte el Grado. ¿Para qué? Para tener acceso más fácil al trabajo. Y así con el máster, los cursos complementarios, los idiomas…

El título es la meta. Y una vez que lo tengas, ya podrás moverte en lo que te interesa, lo que te gusta… ¿Te suena este argumento?

Parece que primero va el programa y luego tus intereses, que lo primero es formarte en algo ‘oficial’, y el resto es casi un hobby. Una universidad que no te dé un título, que no tenga carreras, ni programas oficiales, que cada año imparta materias distintas… parece más un timo que una institución educativa. Y sin embargo algunas de las mejores instituciones educativas funcionan así. El Collège de France, por ejemplo. No tiene facultades, títulos o programas fijos. No exige titulación alguna a sus profesores. ¿Su lema? «Enseña todo». El premio es el trabajo esforzado, la pasión por el saber y el aportar a la cultura otro granito, o gran descubrimiento.

Quizás a ti, que acabas de levantar la cabeza de los libros para leer esto, te parece que una educación así es utópica, y solo para los más eruditos y capacitados. Pero si lo que estás haciendo, la forma en la que estudias ahora no te deja contento, no piensas que estás aprendiendo, quizás es porque necesitamos algo de esa utopía. A lo mejor está llegando la hora de dejar de clasificarnos por títulos y entrar en contacto con lo que cada uno de nosotros somos capaces de aportar al bien común. Piénsalo antes de volver a tus apuntes. Aunque a ti no te llegue a lo mejor podemos trabajar para que los que vengan detrás no acaben estudiando como tú lo haces ahora.

Te puede interesar