- Es una película agradable y divertida muy bien interpretada.
- Es una crítica social en la que trata de poner de relieve las incongruencias a las que nos vemos sometidos. Con personajes muy caricaturescos que logran sacarnos una sonrisa a lo largo de la película. Porque resulta que un hombre de ciencia no es capaz de soportar que su hijo dedique su vida a la religión.
- El guión es sencillo sin extravagancias, pero en el fondo plantea toda una reflexión sobre la relación entre la razón, la fe y los estereotipos. Es una película fácil para pasar un buen rato y reflexionar…
