Muchos de nosotros, gente de a pie, hemos estudiado de una u otra manera la Historia Sagrada. No me refiero a religión o historia de la religión, sino más bien que por cultura o tradición, nos hemos acercado de alguna manera a los relatos de los episodios que han ido viviendo los personajes bíblicos. Eduardo Mendoza se pregunta de forma honda cuáles han sido los relatos que le han marcado en su imaginario personal y que supusieron para él cierta inspiración como escritor. El elenco de situaciones y de personajes que el autor va describiendo, hace que vengan a nuestra memoria recuerdos de aprendizajes de nuestra infancia. Lo hace con mucho humor, con un toque crítico y con el esfuerzo de actualizar de alguna manera lo que la Biblia nos cuenta. Es imposible que aparezca todo, ya que la Biblia es muy extensa y hay mucho que contar. Presenta una selección de los episodios y personajes más relevantes y conocidos de la Historia Sagrada cristiana. Ciertamente es mucho más emocionante la parte del Antiguo Testamento que la del Nuevo. No hay que buscar en este libro un resumen de lo que son estos episodios bíblicos. Se trata de un comentario muy personal tras haberse acercado a ellos desde el plano más personal.
«La Historia Sagrada, por si alguien no lo sabe, era un resumen de los pasajes más relevantes de la Biblia. Quién decidía su relevancia, yo no lo sé. Tengo la impresión de que tenía dad por una tradición que nadie se habría atrevido a disputar ni habría sabido cómo. También supongo que la finalidad de aquella enseñanza era reforzar nuestras creencias religiosas». (p. 14)