La Cuaresma es un camino hacia la Pascua que los cristianos recorremos en comunidad, siguiendo los pasos de Jesús. En él, como escuchamos el Miércoles de Ceniza, se nos proponen varias ayudas: la limosna (material y también de nuestro tiempo) para ayudar a los necesitados, el ayuno (no sólo de pan, sino de tantas otras realidades) y la oración (la personal de lo oculto y la comunitaria).
Desde pastoralsj queremos proponer varios recursos que nos pongan en sintonía con estas ayudas cuaresmales. Dentro de ellas está esta serie centrada en la oración del Alma de Cristo, tan presente en los Ejercicios Espirituales de san Ignacio.
Nuestra intención es ayudar con ella a orar en este camino por el desierto, a la vez que irnos introduciendo en el misterio de la Pascua de Cristo que celebraremos en unas semanas. Ojalá que estas reflexiones, hechas a la luz de la oración, nos ayuden a entrar en nuestro cuarto, cerrar tantas puertas y orar a nuestro Padre que está en lo escondido, a través del misterio y la persona de Cristo.