La ladrona de libros

Sinopsis

Este es un relato sobre la muerte, el amor, los secretos, las palabras y la vida. La ladrona de libros cuenta la historia de una niña de nueve años. Víctima de la persecución nazi, Liesel es analfabeta, acaba de perder a su hermano pequeño y su madre la ha abandonado. Adoptada por un matrimonio alemán que no está de acuerdo con el régimen de Hitler, cuando llega a su nuevo hogar, lo que parece será la típica historia de una huérfana con una madre adoptiva gruñona y un padre adoptivo bonachón, se acabará tornando en la historia de una familia que lucha por sobrevivir en medio de la pobreza generada por la guerra, que acoge a un judío perseguido por los nazis, que se esfuerza por mantener la mente de su hija abierta a la diversidad, y que defiende las injusticias que se van generando alrededor. Liesel se irá encontrando con personajes que la marcarán de por vida: Max, el judío que vive en su sótano; Rudy, el niño de pelo rubio que la adora y quiere robarle un beso; la mujer del alcalde con la que surgirá una amistad centrada en la literatura y en lo que pueden aportar las palabras a sus vidas. Mientras tanto, la muerte sigue campando a sus anchas en el mundo y cada vez se acerca más a la ciudad donde habitan Liesel y sus amigos. Cuando se hace presente está personificada en una voz que no maltrata, que no hiere sino que casi acaricia a todos los que toca.

¿Por qué ver "La ladrona de libros"?

Porque hay películas que muestran el horror del holocausto humano, pero esta muestra el horror del holocausto intelectual, el hecho de destruir libros porque otros piensan de manera diferente y la astucia de una niña para salvar El hombre invisible de las ascuas.

Porque es una película donde la muerte no se presenta como algo a evitar, sino como algo que ha sucedido, que sigue sucediendo y que sucederá en el futuro, y ello no acaba provocando miedo, sino curiosidad. Se presenta a la muerte como algo frío, seco… pero con ciertos celos de la vida.

Porque es necesario que nos cuenten historias, y la pequeña Liesel las cuenta de maravilla, siendo capaz de hacer dormir a un niño en su regazo en medio de un bombardeo.

Porque se necesita una escuela donde se enseñe la importancia de guardar un secreto, y donde se vea que las miradas y los pequeños gestos ayudan a la convivencia. La ladrona de libros es buena maestra en todo esto.

Porque la vida de Liesel está llena de sentido a pesar del sufrimiento y nos faltan ejemplos de personas que encuentren sentido a sus vidas a pesar del dolor y de la soledad, del sentirse abandonados. Se hace imprescindible hoy día mirar ejemplos de personas que no tiran la toalla.

Para pensar

1. Al inicio de la historia, en un plano cénit, la Muerte se va presentando a sí misma. Lo hace de una manera no hiriente, neutra, tranquila, y la siguiente escena es una escena que, cargada de dolor, se ha relativizado al máximo. ¿Qué sentimiento te provoca el recordarla?

2. Liesel roba libros en tres momentos de la historia. El primero, al sepulturero, el segundo a Max y finalmente, se cuela varias veces en casa del alcalde. ¿Qué aprende con cada uno de esos libros?

3. Liesel escribe en su libro: «Todo empezó con el tren, la nieve, y la tos de mi hermano». ¿Qué otro personaje habló así al inicio de la historia? ¿Qué diferencia hay entre ambos personajes?

4. Max dice a Liesel que hay que «recordar en las palabras». ¿Qué crees que significa esta expresión en el contexto en que se lo dice?

5. Cuando el padre de Liesel defienden al tendero delante de la Gestapo, le razonará a su hija que «recordar la humanidad es lo que hacen las personas». ¿Por qué le dice estas palabras?

6. En la última escena, la Muerte asegura que se siente acechada por los vivos. ¿Cuál crees que es la tesis de la historia de Liesel?