Nos empeñamos en apropiarnos de todo
y nos quedamos solo con la frustración.
Queremos programar cada instante
pero la vida se nos escapa de las manos.
Nos gustaría conocerlo todo
y nos descubrimos los más ignorantes.
Soñamos con triunfar en cada proyecto
pero el fracaso nos devuelve a nuestro sitio.
Lo tuyo es dar, darte, sin calcular.
Lo nuestro es recibir, acoger, sin preguntar.
Solo me conozco al mirarme en Ti.
Eres el manantial del que todo brota,
donde veo la primera luz y empiezo a correr.
Eres el mar, donde todo acaba
hacia allá me dirijo, en Ti quiero descansar.