Cultivando el presente

Una clave para progresar en la oración es cultivar el presente y permanecer en él, y el modo para situarse ahí es volver sobre los sentidos. Dios no sólo habla en los pensamientos, también lo hace en los sentidos y nuestro cuerpo. Por aquí crece esta propuesta de oración. Por ir cuidando la capacidad de sentir, de ser consciente de todo lo que ocurre dentro y fuera de uno, por buscar ese silencio que está habitado, esas formas, luces y colores que nos abren a un mundo vivo y lleno de posibilidades