Nos pasamos una parte de la vida aplazando las cosas simples, pero importantes: un café con alguien, una sonrisa, un abrazo, una disculpa… Otra parte la pasamos lamentándonos de nuestra mala suerte porque se nos van las oportunidades, porque no conseguimos lo que nos proponemos…

Gustavo Almeida nos propone un tema fundamentalmente positivo. A pesar de las dificultades, de las barreras, hay que mirar la vida de frente, con coraje para seguir soñando en grande…

Gustavo Almeida (Desde el coche)

Aún nos queda tiempo para acostumbrarnos
que la vida es como es
Poniendo del derecho el alma
porque el mundo está quedando del revés
Lo malo es que a veces no hay tiempo
Lo bueno es poder empezar
“La felicidad está
en la sala de espera de la felicidad”

Y malditas las preguntas:
“¿Por qué me pasó a mí?”
“¿Cómo pudo pasar?”
Hay que saber que la suerte
que quita la vida
es la misma que te la puede salvar
Vivir es un tongo sin vuelta
A quien se esquiva la verdad
Porque la vida es un regalo
y siempre hay tiempo para estar más vivo

Por eso hay que seguir bailando
mientras haya música
Seguir riendo mientras haya un chiste
Seguir soñando porque aún es gratis
Porque para un sueño aún no hay peaje
Mirar la vida de reojo me ha hecho más frágil
Y al hacerlo de frente inmolé al cobarde
Las barreras siguen en pie,
pero con la diferencia que
Hoy yo soy más fuerte.

Da igual donde tú hayas nacido
Nuestra sangre es roja y hasta sabe igual
“Falando a língua que tu falas”
si es mezquina la saliva, siempre sabe mal
Lo que pasó a un gitano en India
le pasó a un gallego más allá del mar

Y malditas las preguntas:
“¿Por qué me pasó a mí?”
“¿Cómo pudo pasar?”
Hay que saber que la suerte
que quita la vida es la misma
que te la puede salvar
Por eso voy cantando al viento
Besar, sentir y abrazar
Reír si puedo a carcajadas
y quitar de encima el vértigo a volar.

Por eso hay que seguir bailando
mientras haya música
Seguir riendo mientras haya un chiste
Seguir soñando porque aún es gratis
Porque para un sueño aún no hay peaje
Mirar la vida de reojo me ha hecho más frágil
Y al hacerlo de frente inmolé al cobarde
Las barreras siguen en pie,
pero con la diferencia que
Hoy yo soy más fuerte.

Mirar la vida de reojo me ha hecho más frágil
Y al hacerlo de frente inmolé al cobarde
Las barreras siguen en pie,
pero con la diferencia que
Hoy yo soy más fuerte.

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